viernes, 29 de enero de 2010

Oda a la naturaleza

Este canto tan hermoso
que me brindas cada día
alegra mi vida,
mi mente se tranquiliza,
el aire en mis pulmones,
la luz en mi rostro,
me hacen amarte más.
Bella madre mía
que sin ti,
mi existencia no tiene sentido.
Verde, verde
sólo así quiero verte
crecer cada día,
iluminando cada rincón
y volando contigo,
abrazándote siempre,
sentirte y olerte
al mismo tiempo
que nos unimos.
Bella madre nuestra,
te amo con desesperación
y te agradezco
con mis más humildes sentimientos,
que emergen desde lo profundo,
el cantar mañanero.

3 comentarios:

Miguel Muñoz dijo...

me dieron ganas de llorar leyendo esto..

Te extraño (de una manera metafísica)

ISMA dijo...

maee
me enviaje
me enviajó mejor dicho
jajaja
esta buenisimo
de lo mejor que he leido
=D

Fernando dijo...

Cuando lo leo me transporto a un lugar del cual no kisiera regresar